¿Te sientes incapaz de hacer aquello que quieres?

Bloqueada y agotada, seguramente esta sea tu sensación y la que hace que no veas la forma de poder hacer aquello que tanto te gustaría.

Y es normal, le has dado tantas vueltas a cómo poder hacerlo, lo has analizado tanto y le has encontrado miles de trabas que ahora parece una misión imposible.

Y ahí te has quedado atrapada, en ese lugar de insatisfacción eterna, lidiando constantemente con dos vocecillas, una que se resiente y te dice ‘bueno, si tampoco estoy tan mal’ y la otra que grita desesperada y te dice ‘ya está bien, no puedo seguir así, necesito cambiar’.

Y yo hoy vengo a decirte que es a la segunda voz a la que tienes que escuchar.

Detrás de ella se esconden dos aspectos fundamentales que son los que no te están dejando hacer aquello que quieres y que son precisamente en lo que necesitas trabajar:

• Tus miedos
• Y tus creencias limitantes

Miedo al que pasará; miedo al qué dirán; miedo a fallar, miedo a equivocarte; miedo a no poder volver a atrás…

Creer que no eres capaz, creer que, en el fondo, tú no deberías hacer algo así; creer que ya es tarde para hacerlo (muy mayor); creer que es muy difícil…

Y así un largo etcétera…

Quizás te pensabas que tenía que ver con otras cosas, con las circunstancias de tu entorno, con la falta de tiempo, con la falta de organización, con no estar motivada, etc, pero la realidad es que esto es consecuencia de lo anterior.

Y yo ahora podría hacerte una lista de cosas a hacer por tu cuenta para trabajar en estos dos aspectos pero sé que ya lo has intentado y no te ha funcionado, por lo que te propongo que primero trabajes en romper una creencia que todas tenemos y que es la que más nos pesa a la hora de poder generar ese cambio que tanto ansiamos:

‘Si pido ayuda es que no soy lo suficientemente buena ni capaz. Tengo que poder yo sola» 

¿Te habías parado a pensar en ella?

Pues para que puedas romper con esta creencia que hace que al final te limite tanto a la hora de poder hacer aquello que quieres, te lanzo algunas preguntas:

• ¿Cómo de verdadero es esto realmente para ti?
• ¿Qué significa realmente ser buena y capaz?
• ¿De qué depende realmente tu capacidad?
• ¿Qué es más importante, hacerlo sola o hacerlo?
• ¿Qué es lo que te va a hacer sentir realmente bien, el poder hacer aquello que quieres o el hacerlo tú sola?

Madre mía, no sabes la de tiempo y frustración que me hubiese ahorrado a mí misma si hubiese roto con esta creencia mucho antes de lo que lo hice.

Y es que yo era de las que pensaban que no la tenía. La negación de lo evidente es otro gran tema a tratar, pero con el tiempo me di cuenta que sí que la tenía, que había una voz dentro de mí que me decía que yo como mujer madura e independiente tenía que poder ser capaz de conseguir todo por mi cuenta, sin la ayuda de nadie, y lo que no me daba cuenta es que al no pedir ayuda y al no poder conseguirlo por mí misma, más me autobloqueaba, más me frustraba y más me llevaba a dudar de mí misma y de mis capacidades, y como consecuencia, menos podía avanzar.

Y al trabajar esta creencia mi conclusión fue la siguiente:

“Pedir ayuda y dejar que alguien me acompañe es, precisamente, un acto de fuerza y valentía, además de ser la vía más segura y directa para poder conseguir aquello que me propongo”

Hoy en día esto lo sigo aplicando, me sigo dejando acompañar al mismo tiempo que yo también acompaño. Y es que nos necesitamos, y déjame decirte que hay nada de malo en ello…(otra creencia en la que también podríamos trabajar, la de creer que es malo necesitar a los demás…)

¿Y por qué es esto así? ¿Por qué dejarte ayudar es importante?

Porque el que te acompaña…

• Te hará preguntas que no tú no te haces a ti misma y que son claves para que puedas ir derrumbando todo lo que se pone en tu camino
• Te propondrá ejercicios que tú no harías por ti misma y que te permitirán descubrir cosas de las que no eres consciente y que son necesarias para que puedas avanzar
• Te ayudará a ver alternativas y posibilidades que tú por ti misma no eres capaz de ver porque precisamente, te has bloqueado y paralizado, y necesitas otros ojos que amplíen la mirada
• Te dotará de seguridad y confianza al ayudarte a conectar con todas tus fortalezas y capacidades, esas que con tanta frecuencia olvidas de ti misma
• Te ayudará a poner claridad sobre los pasos a dar y cómo darlos, esos que ahora mismo no ves claro o aún creyendo que los tienes, no eres capaz de dar
• Te dotará de herramientas para poder gestionar las emociones que te puedan bloquear
• Te ayudará a accionar y a avanzar, dándote ese empujoncito que a ti misma te cuesta tanto dar.

Si sientes que esto es lo que a ti también te pasa, te propongo que des ese primer paso, y permitas que alguien te eche una mano.

Mándame un mensaje, cuéntame que es eso que te gustaría hacer y que no estás sintiéndote capaz de poder hacerlo, y yo te cuento cómo puedo acompañarte a que lo logres.

Te mando un abrazo,

Gema